Fernando y su familia

Nos reciben en casa de Justi con muchísima amabilidad y atención. Fernando, el padre de Justi, es un hombre de apariencia afable, nos mira con curiosidad, y una sonrisa pícara baila en sus ojos. Con una voz pausada y tranquila empieza su relato, lleno de detalles, pero cuando se recrea en alguna anécdota, sus ojos sonríen abiertamente.
Esta es su historia:

Fernando es de Oliva de la Frontera,(Badajoz), allí habitaba con su mujer y sus dos hijas. Vivían del campo, que era de lo que vivía todo el mundo en aquella época. Un día Fernando y unos amigos oyeron que "estaban apuntado para irse a Alemania". Eran los del sindicato , que venían para anotar a todos aquellos que querían marchar hacia el extranjero. Primero les hicieron un reconocimiento médico en Badajoz. Cuenta Fernando que alguno fue rechazado porque no oía bien. Cuando lo pasaban, firmaban un contrato de trabajo, montaban en un tren y hacia Alemania.

Fernando dejó atrás a su mujer y a sus hijas en el año 1963 y se trasladó a la ciudad de Weinheim, una ciudad al noroeste del estado de Baden-Württemberg, sede de la reputada empresa Freundenberg que comercializa marcas tan importantes en toda Europa como VILEDA, lubricantes KLÜBER o CORTECO.

Cuando llegó a Alemania, Fernando empezó a trabajar en la construcción de jardines y de parques infantiles. Trabajaba ocho horas al día, durante tres meses:diciembre, enero y febrero. Además trabajaba en Freundenberg a tres turnos,mañana tarde y noche, según la semana.

A los tres años de estar en Alemania se trajo a su mujer y a sus hijas. No regresaron hasta que no les dieron la jubilación. Una de sus hijas, con su familia, sigue viviendo en Alemania.